30/01/2018
El Campo del Huevo
Mi nombre es Miguel Sánchez Cordero, vecino de El Carmen desde los años 70 cuando llegué ya casado y con tres hijos. Me gusta mucho mi barriada porque es como un pueblecito dentro de la ciudad y he estado implicado activamente en ella siendo durante muchos años vicepresidente y presidente de su asociación vecinal.
Entre la multitud de curiosidades y rincones que tiene El Carmen, aprovecho este espacio que me brinda el proyecto _re-HABITAR para contar brevemente la historia del Campo del Huevo, un lugar que permanece desde antes, incluso, de la construcción del propio conjunto residencial donde vivo.
Lo que hoy se conoce como el Centro Deportivo el Campo del Huevo, está ubicado en la confluencia de las calles Rubén Darío con San José de Calasanz, y concretamente entre la sede de Viento Sur Teatro y la asociación de vecinos.
Antiguamente, este solar se usaba de escombrera. Era el sitio donde se tiraban los restos de las obras que se hacían en Triana. Se le conocía con ese nombre porque había un gran socavón en el centro donde se arrojaba todo, formando un montículo con forma ahuevada.
Los padres y las madres prohibían a sus hijos, a los que le gustaba merodear la zona, que fueran más allá del Campo del Huevo, ya que el límite de esa zona era el muro de contención tras el cual estaba la vía del tren.
Hoy día el Campo del Huevo se ha convertido en un centro deportivo con una pista de fútbol 5 que se adapta a otros deportes. Es raro verlo vacío, siempre hay un grupo de niños/as o jóvenes jugando y la verdad es que eso está muy bien. Además entrenan varios equipos de fútbol sala, sobre todo de Triana.