- 1655
- Óleo sobre lienzo
- 193 x 165 cm
San Isidoro fue arzobispo de Sevilla. Esta obra fue costeada por el canónigo de la catedral de Sevilla don Juan Federighi. Se representa con una gran solemnidad, sentado en un sillón, llevando sobre la cabeza la mitra, sujetando el báculo con gran firmeza y sosteniendo con la mano izquierda un gran libro que lee atentamente. Su dedicación a la escritura de textos sagrados queda patente en los dos libros que aparecen sobre la mesa, Las Etimologías y De Summo Bono. De gran interés son las vestimentas ricamente bordadas en oro. Como fondo, tras el santo un amplio y movido cortinaje rojo y a la derecha un espacio iluminado con parte de un pedestal y columna.







